Utopías de una Periodista

Aún recuerdo la primera vez que hablé con un techero. Fue verdaderamente un éxito! Desde ahí en mi mente empecé a amar esa historia, ese mover de jóvenes combatiendo la pobreza extrema! Eh de admitir que yo nunca creí volverme tan humana. Soñar con ir a construir viviendas en un precario. Jugar con los niños de dicho lugar. Nunca pero nunca pasó eso por mi cabeza. En fin, la vida da tantas vueltas que cuando yo creía que era utópico ser parte de los techeros. Pero bueno, como diría quien ahora es mi "padre del techo" yo fundé la Red de Techeros Virtuales; porque así es como entré a esto, conociendo gente por msn, y hablando. Sin embargo un día mi vida de techera virtual tenía que convertirse en "real". Tal vez no fue nada, quizá fue simplemente mi emoción de saber que las piedras que me impedían ayudar a que mi país fuera libre de pobreza extrema, pero fue! Y así empieza todo: Nohe podés venir a la ofis el viernes, sería bueno que la conocieras- diría Rosa, claro! ahí llego, le contesté. Toda una odisea!! ¿Quién me iba a acompañar a Curridabat? Era obvio que sola no podía llegar, y que mi mamá jamás me concedería el permiso. Pero entonces me acordé del "color", y le rogué que fuera conmigo: Natha xfa!!!! Está bien, pero espero que no sea una pérdida de tiempo, a las 12 30 la espero en Delicias diría Nathanael; ahí estaré! le respondí. Y eran las 12 y mi mamá me decía: Oh Nathanael que es alcahueta! No mami, buen amigo es lo que es- le dije. Y llegaron las 12: 3o pm y ahi estaba yo; con una estola en la cintura (como es común en mi algo tenía que andar guindado). Estaba ansiosa! Y fue un raro viaje; Natha! Mirá donde se cojen los buses de Curridabat, le dije, mientras él me seguía la conversación. Y ya estábamos prontos a llegar entonces llamé a Rose: ¿dónde te espero? le pregunté, - en la pura entradita del Outlet Mall- me contestó con su suave voz. Y llegamos a la UCR, era visiblemente lógico que teníamos que pasar a comprar pan de "La Canela". Así fue.. Pero luego llegamos al Outlet, y esperamos a que Rose llegara, y llegó! Y nos enseñó cual bus tomar. De camino íbamos hablando, ella me contaba acerca de lo rajado que es viajar a Chile con el Techo; mis ojos se iluminaban: CHILE! Cualquiera que me conozca un poco sabe que amo ese país, y que anhelo tener un novio chileno que me hable al oído con ese acento que simplemente me derrite (OMG! que cursi :S). Acá es donde tenés que tocar el timbre; me dijo ella, y yo ponía atención porque era mi momento de aprender a llegar. Y al fin llegamos, caminamos un poco pero ahí estaba la oficina! Una casa más bien. Entré, era un hecho: tuve que haber hecho "ojitos". Ella es Nohelia-diría Rose presentándome. Qué éxito! Demasiado bueno el lugar, increíble la gente! Estaba entusiasmada, hasta ayudé con el muchacho de Detección! Aunque eso de ordenar los papeles estuvo medio enredado, pero en fin. Luego llegó el tiempo de ir a repartir volantes al concierto de Aterciopelados; pero antes de eso: la camiseta! Síiiiiii! Mi camiseta del Techo, eso me "uniformaba" como techera oficial! Gracias a Rosa pude ir al concierto. Por cierto, ella es lo máximo! Demasiado increíble persona! (sos un éxito!). Nos encaminamos hacia la UCR, antes de que eso sucediera yo le envié un mensaje a Aarón, sí sí, el rockandrollero como él mismo se describe: Aarón sabés donde estoy?--- Jaja dónde? En la ofis del Techo! Fijo está como loca ud; siiiiii le dije! Aarón es el primer techero que yo vi en mi vida (solo lo he visto una vez aclaro), y es demasiado rajado ese hombre! (Aarón Suárez: mi padre del techo :). Luego de terminar mi conversación con el señor padre llegué a la UCR y caminé y caminé y caminé hasta que llegamos a las Instalaciones Deportivas. Ahí tuve que dejar botado mi pan de canela :(. Fue increíblemente divertido ver como las mujeres usaban sus estrategias para guardar cigarros en mmmm bueno, por ahí! Finalizada la larga fila estuvimos en el bendito concierto que prometía ser buenísimo! Lástima que no pude quedarme más tiempo. No podía finalizar el día sin conocer a alguien que creo que ya conocía aunque no fuese físicamente. Estresada lo llamé (estrés que me provocó no saber a quien darle las entradas que andaba). Leo donde estás? le dij; casi por media calle, al frente de una cosa que dice AquaMatic (algo así) y yo... yo estaba casi a la par y no lo había visto! Hola Leooo! ey Hola Nohe- me respondió. Fue divertido, porque no sentí que no lo conociera. Eso fue otra cosa que no pensé, que iba a conocer al famoso señor Quijano ahí. Pero en fin, la noche no acabó ahí. Para el mundo ese día no fue nada, pero para mi fue el acercamiento a lo que tanto quería: sentirme parte de eso que llaman "el techo". Me quedó la experiencia de conocer a mucha gente, de trabajar aunque fuese un rato en la ofi. De sentirme una techera más :) Sí para mi el sólo hecho de conocer la oficina fue importante ¿qué sentiré el día que vaya a construir por primera vez? No sé, esa será ya otra historia. Sin embargo, como dirían por ahi: tengo "prohibido detenerme"; porque ya llegará el tiempo para mi!!!! :) PD: Natha, gracias por haberme acompañado.